Finalmente y luego de años de desinversión, lo que era previsible se convirtió en realidad.
Me llega la noticia a través del Mayor (R) Guillermo Sabino Posadas, quién durante el conflicto del Atlántico Sur fuera Jefe de Mantenimiento del II Escuadrón Aeromóvil Dagger, que la cuna de los aviadores militares argentinos, la Escuela de Aviación Militar, no tiene mas aeronaves para volar por falta de repuestos e inspecciones que no se pueden hacer por falta de recursos.
Para, de alguna forma, poder completar los cursos que se estaban desarrollando y en un intento desesperado, se pidieron aviones prestados al Brasil, país que generosamente nos mando 5 Embraer Tucanos en no muy buenas condiciones pero que al menos pueden volar.
“Creo que solo queda que vengan instructores brasileros a enseñarnos como se debe combatir, a nosotros, que peleamos una guerra donde supimos mostrar al mundo la valía y el profesionalismo de la aviación argentina en todos los ordenes” – afirma el Mayor (R) Posadas.
En lo personal, me ocupo de temas militares, pero en Argentina, la falta de inversión también se hace sentir en otros ámbitos como la educación, la salud y la seguridad.
En este sitio se pueden ver fotos de los aviones brasileros en los Hangares de la Escuela de Aviación Militar, algunos con la escarapela brasilera tapada con cintas y con matriculas nacionales pintadas en forma provisoria y muy precaria por cierto.
Pensar que fuimos pioneros en el diseño y fabricación de aviones y ahora usamos los fabricados por Brasil que cuenta con menor experiencia en este campo, aunque mucha pujanza y apoyo del Estado. Acá por el contrario, siempre son mal vistas las instituciones castrenses y en parte es por ello que se produce la desinversión. Es más popular (decir que que se van a) construir escuelas y hospitales que dar recursos económicos a las Fuerzas Armadas, pero este ya es otro tema.